miércoles, 19 de junio de 2019

BORGES VIENE A CENAR. HEMEROTECA LITERARIA.



REPORTAJE: MEMORIA INÉDITA DE DOS ESCRITORES
Borges viene a cenar
Adolfo Bioy Casares relató en un diario de 1.700 páginas los encuentros con su amigo
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Madrid 14 OCT 2006
Una tarde de 1931, uno de los escritores jóvenes de mayor renombre en Argentina conoció a un muchacho envenenado de literatura. Hablaron de libros y se volvieron inseparables. El joven, de 32 años, se llamaba Jorge Luis Borges. El muchacho, de 17, Adolfo Bioy Casares. No había pasado un lustro cuando concibieron su primera obra a cuatro manos, un extravagante folleto comercial sobre las virtudes de "un alimento más o menos búlgaro": la cuajada. Lejos de toda frivolidad, aquel legendario cuadernillo tuvo para Bioy un carácter iniciático: "Después de su redacción yo era otro escritor. Toda colaboración con Borges equivalía a años de trabajo". Aquella primera tentativa de literatura láctea desembocó en el nacimiento de Bustos Domecq, el nombre con el que los dos amigos firmaron varias colecciones de cuentos policiales en los que, según Borges, él ponía los argumentos y Bioy, "las frases".
"María Kodama  lo castigaba con silencios. Junto a ella vivía temiendo enojarla"
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·         Esta tarde murió en Ginebra
·         Una amistad
Lo mismo cabría decir de las notas que el propio Bioy Casares dedicó en sus diarios al autor de El Aleph. En efecto, aquél puso los argumentos y éste, las palabras a lo largo de centenares de encuentros consignados la mayoría de las veces con el mismo encabezamiento: "Come en casa Borges". De las 20.000 páginas de cuadernos íntimos que Bioy escribió a lo largo de su vida, su relación con Borges ocupa 1.700. Son las que antes de morir, en 1999, preparó para su publicación con la ayuda de Daniel Martino, su albacea. El resultado es un vibrante adoquín lleno de nombres pero sin índice onomástico que, con el escueto título de Borges, la editorial Destino publicará en todo el mundo de habla hispana el próximo día 19. Aunque el libro se extiende entre 1931 y 1989, la verdad es que Bioy resume los 15 primeros años en una decena de páginas. Eso sí, brillantes. Son los tiempos del primer encuentro, de la cuajada, la fundación de revistas y editoriales efímeras y de la boda, en 1940, entre Adolfo Bioy Casares y la también escritora Silvina Ocampo. El padrino fue, por supuesto, Borges.
Como era de esperar, los diarios borgianos de Bioy están llenos de literatura. Cena tras cena, los dos escritores van alimentando lo que en una entrevista el propio Borges admitió como una profunda amistad "sin intimidad" cuya piedra angular eran los libros. Así, si Georgie se consideraba irónicamente "un viejo discípulo" de Adolfito, éste reconoce nada más abrir sus anotaciones que su amigo le hizo comprender la inutilidad de la libertad total, "la libertad idiota" que había defendido literariamente hasta entonces. Por supuesto, donde hay literatura hay literatos. Así, por aquella mesa pasó también la admiración por los clásicos "queribles" -Stevenson, Kafka, Cervantes, Montaigne- y el desdén por contemporáneos como Ortega, Baroja, Juan Ramón Jiménez -los suecos del Nobel "son mejores para inventar la dinamita que para dar premios"-, Alberti -Marinero en tierra "es una porquería"-, Sábato -"su conversación es anecdótica, sin pensamiento"- o Augusto Roa Bastos -"un subalterno"-.
Con todo, en casi 2.000 páginas cabe mucha literatura pero también mucha vida. Caben los temores de Borges a no ser reconocido por los porteros de la Biblioteca Nacional de Buenos Aires cuando fue nombrado director en 1955 y caben los crecientes problemas de retina que terminarían en ceguera. Y cabe, con cuentagotas, la política, más la internacional que la doméstica pese al peronismo y al golpe militar de 1976. Así, durante la guerra de los Seis Días, el autor de El libro de arena arremete contra los que defienden la causa árabe frente a Israel: "Los fascina la bajeza [...] Si hubiera una guerra entre suizos y lapones todos serían partidarios de los lapones [...] Los árabes de hoy no son los que levantaron la Alhambra", decía Borges.
Reconocido seductor, Bioy relata menos sus propias aventuras que las tormentosas relaciones de su amigo, que en 1967 se casa con Elsa Astete. "Pongo mi destino en manos de una desconocida", recuerda que dijo Borges. Una desconocida a la que Bioy encuentra ignorante pero respetuosa, "en actitud de sierva enamorada". Cuando llega el turno de María Kodama -con la que Borges, divorciado de Astete, se casó en Ginebra poco antes de morir en 1986-, el tono de las anotaciones no ahorra acritud. Al principio Bioy evita azuzar las inquinas desatadas contra Kodama, a la que algunos consideraban responsable de que el escritor muriera lejos de sus amigos argentinos: "Borges me dijo que para morir da lo mismo un sitio que otro. Y qué lujo: tener un amor, y aun mal de amores a los ochenta y tantos". Pasado el tiempo, cambian las formas: "María es una mujer de idiosincrasia extraña; acusaba a Borges por cualquier motivo; lo castigaba con silencios (recuérdese que estaba ciego); lo celaba (se ponía furiosa ante la devoción de los admiradores). Junto a ella vivía temiendo enojarla". El diario se cierra con un último recuerdo. Antes de morir, alguien grabó a Borges cantando tangos. Y Bioy apunta: "Dicen que en esa grabación Borges ríe con la risa de siempre".

* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 14 de octubre de 2006
Fuente:

Gracián, premios, Kafka,Swedenborg, Pereda, etc. Bioy Casares. Diarios íntimos. Borges.



Martes, 27 de agosto.

Come en casa Borges. Hablamos de la falta de
criterio de Gracián y la comparamos con la de Guillermo de Torre. BIOY:
341
1957
«Gracián mira las cosas más de cerca; las analiza, estúpidamente, pero las
analiza. Guillermo no lee: se forma ideas sobre los libros hojeando solapas,
y se obstina en ellas».

(...)
BORGES: «La explicación de Gracián2 también está bien». BIOY: «Estos
tercetos son agradables, por cómo se desenvuelve la idea, sin señalarla
crudamente». BORGES: «Y está bien el tono modesto. Todavía no se
había descubierto que lo importante es el tono en que se dicen las cosas.
Gracián sólo sabe elogiar, asegurando que tal poeta es el más grande, el
señor y emperador de los poetas, y que con tales versos vence a todos, a
todos avergüenza. Su mundo es de competencia, de marcar tantos, de
hundir a los rivales. ¿Por qué rivales? Habla de Dios y de los ángeles
como de reyes y de cortesanos; si menciona a la Virgen la llama "la señora
del cielo"».
***

Viernes, 6 de septiembre. 1957.

 Yo no creo que haya un gran mérito moral en rechazar un premio. Total, el honor ya lo
había obtenido; le faltaba recibir la medalla. ¿Qué iba a hacer con la medalla?
¿Venderla? ¿Metérsela en el culo?
Pag.349.
(...)
Hablamos sobre Kafka, sobre el mundo de incertidumbres de
Kafka, que, en vez de ser la tragedia de la vida, se nos aparece como un
juego, o como un consuelo intelectual al que desearíamos apelar en
medio de nuestros infortunios. En nuestra vida, las dichas son dichas;
los fracasos, fracasos. Nuestros problemas son demasiado precisos.
Pienso que en Kafka, sin embargo, ese mundo no era falso; Kafka vivía
pensando en la salvación. Borges dice que esa literatura correspondía
a experiencias religiosas, al calvinismo, etcétera. Tal vez en Buenos Aires,
agrega, no haya una persona que sienta así. Por eso, tal vez, la imitación
de Kafka da resultados tan poco satisfactorios; sólo queda la
forma.
Pag. 350.

***
Sábado, 7 de septiembre.

Leemos nuestro Libro del cielo y del infierno. BORGES: «Es un libro excelente
». Comentamos que es curioso que nadie haya advertido que todo
el infierno de Shaw y de Sartre procede de Swedenborg. BIOY: «La de
Swedenborg es mucho mejor que la escatología católica. Mucho más creíble
». BORGES: «Mucho mejor que la escatología de Dante, que es puro
premio y castigo. ¿Cómo pudo Dante poner en el infierno a Paolo y a
Francesca? Son gente noble».
Pag.351.
***

Lunes, 9 de septiembre. 1957.
 Come en casa Borges.

Recito versos del Castellano leal, del duque de Rivas. Hablamos de
doña Emilia Pardo Bazán y de don Antonio, de Cecilia Böhl de Faber y
su Gaviota, de Pereda. BIOY: «El tema de Peñas arriba y de muchas novelas
españolas, de un hombre de ciudad que por alguna circunstancia va al
campo o a la aldea, me parece rico en posibilidades».
Pag. 354.
Nº de páginas:1664
Editorial:DESTINO
Idioma:CASTELLANO
Encuadernación:Tapa dura
ISBN:9788423338733
Año de edición:2006

Plaza de edición:BARCELONA
















lunes, 17 de junio de 2019

Realismo, lo verosímil del relato,literatura, Sabato, Molinari Bioy Casares. Diarios íntimos. Borges.


Sábado, 10 de agosto, 1957.
Se menciona a Verbitsky y su novela Calles de tango. BORGES: «¡Qué título!
El procedimiento de Verbitsky es bastante extraño: relata hechos verosímiles,
sin deformarlos con ninguna intención, sin ninguna ironía. El
resultado son páginas y páginas de realismo y, sobre todo, de tedio. A vos
Verbitsky te atacó porque le parecía que no podías escribir sobre orilleros.
Pag. 328.
***
Jueves, 15 de agosto. 1957.
Borges llama por teléfono. Me dice: «En Azul y
Blanco me atacan todos los días, en una suerte de folletín. ¿A que no sabés
quién salió a defenderme? ¡Sabato! Qué porquería. Cualquier cosa,
con tal de no quedarse quieto. Cómo no se da cuenta de que parece un
payaso. Ahora aparece con careta. Se saca la careta y vemos que es Sa¬
bato. Ahora aparece de buzo. Se saca la escafandra y vemos que es Sabato.
No aspira a ser majestuoso ni a mostrar una noble indiferencia».
Pag. 330.
***

Lunes, 26 de agosto. 1957.

Se habla de Molinari. BORGES: «Para él es muy importante ganar premios.
Si no es un gran poeta, no es nada. A lo que puede aspirar es a alinearse
con los grandes autores que nadie lee; a ser leído no puede aspirar.
Qué raro que para llegar a ser poeta exquisito haya insistido en esa
personalidad suya de muchacho jodón, suburbano y casi rústico. Muy
rústico: "Qué decís pendejo, qué contás". Ahora se me presenta de nuevo
el problema de no votarlo, para el premio de la Cámara del Libro. Molinari
ha dicho que aunque todos se jodan, él va a salir premiado. Ahora
veremos. Está Battistessa, que ha de querer votar por él. Con Mastronardi
tengo que hablar: no creo que Mastronardi se vaya a dar vuelta y vaya a
querer votarlo. Ha de ser como yo: una vez que tuvo rabia, sigue con la
rabia. Esto no es admirable: es una reacción primaria. Pero en este caso
es útil, porque realmente Molinari no vale nada. Cuando estábamos discutiendo
a quién dar el Premio Nacional, mandó a una amiga a casa, que
me dijo que Molinari estaba muy contento de que yo estuviera en el jurado,
y que deseaba ganar el premio porque, contando con el dinero, habría
comprado un terrenito y que se enfurecería si supiera que ella había
venido a verme, porque no quería que me hablara en su favor... Le
contesté que no me interesaba la suerte de Molinari como terrateniente.
Pag. 341.
Nº de páginas:1664
Editorial:DESTINO
Idioma:CASTELLANO
Encuadernación:Tapa dura
ISBN:9788423338733
Año de edición:2006

Plaza de edición:BARCELONA

sábado, 15 de junio de 2019

Antonio Machado, Poe, Maupassant, Huxley, Chesterton. Bioy Casares. Diarios íntimos. Borges.


Domingo, 4 de agosto 1957.
(Nota: Guillermo se refiere a Guillermo de Torre. J. Méndez-Limbrick).

Hablamos de los Machado; de los autores apócrifos, Juan de Mairena
y otros, inventados por Antonio Machado; de un artículo de Guillermo
de Torre sobre Antonio Machado, publicado en La Nación de hoy. BORGES:
«Es muy malo. ¿Por qué lo habrá escrito? En un libro, Martínez Estrada
cita a Guillermo. Qué sospechoso. No creo que pueda engañar a
Martínez Estrada. Aunque Martínez Estrada es tan ignorante... Y tampoco
esa cita puede ser por caridad hacia el amigo. Ha de ser interesada
». Sobre Guillermo dice: «Es un idiota, pero no hay que dejarse engañar
por ello: también es una mala persona».
(...)
Lamenta que Poe haya muerto tan joven. Habría podido escribir mucho:
«Si se tiene en cuenta que lo que uno escribe es una fracción de lo
que uno inventa... Escribió, pensó, inventó, no se resignó a reescribir
siempre el mismo tema. Mucho más diverso que Maupassant y que Ches¬
terton. Ejemplos de diversidad son "The Cask of Amontillado" y "The
1957
Man in the Croad". Aunque haya alguna repetición de frases de asombro,
un poco tontas, son esencialmente concepciones diversas». Reconoce
que, a pesar de algunos recursos mecánicos, hay cuentos muy lindos
de Maupassant.
(...)
Hablamos sobre máquinas. BORGES: «Mi hermana se pregunta por
qué, si a Huxley no le gustan las máquinas, habla tanto de ellas. No habría
que tratar temas que a uno le disgustan. Si no, hay complacencia y
se colabora en la proliferación de las fealdades.

Martes, 6 de agosto de 1957.
(Nota: Victoria Ocampo: Cuñada de Bioy Casares).
Victoria nos invita a comer, con Lanza del Vasto, en San Isidro.
Nos excusamos, con Borges, y la cara de Victoria se descompone.
Come en casa Borges.


martes, 11 de junio de 2019

Sostener la palabra: la poesía costarricense actual.

Sostener la palabra: la poesía costarricense actual

I

La poesía viene de un lugar que nadie domina y nadie puede conquistar.
Leonard Cohen
Hablar de poesía siempre es problemático, es quizás el menos definible de todos los géneros literarios. Esta cualidad, que para algunos es un defecto, para otros constituye su más preciada virtud. ¿Qué características deben tener las palabras reunidas en versos para que en conjunto formen un poema? Ninguna, ni siquiera la rima o una estructura específica en versos y estrofas son condiciones necesarias para que la palabra escrita adquiera la misteriosa y mágica cualidad de ser poesía. Podemos ir más allá, pues tampoco es absolutamente necesario que estén escritas.
En un remoto pueblo de las montañas de Asturias, en el norte de España, conocí hace bastantes años a un poeta campesino. Era ganadero y labrador, naturista y vegetariano por convicción en un medio y un tiempo, los años ochenta del pasado siglo, cuando manejar esos conceptos era algo ajeno a aquel mundo donde prevalecía la dieta del embutido y la falta de conciencia sobre salud física y ecológica. El nombre de este poeta es Hilario Marrón. En nuestros diferentes encuentros, caminatas y charlas al calor del fuego y la amistad, Hilario me recitó un sinnúmero de poemas que nunca habían sido escritos en soporte alguno. Habían surgido de su mente en momentos de inspiración —casi siempre provocada por el asombro ante la sublime belleza de la naturaleza— y permanecían vivos en ella. Incluso habían evolucionado con el tiempo y había hecho correcciones de estilo, en ese mismo soporte neuronal, a aquellas églogas emanadas de la plenitud que sentía en su existencia campestre y bucólica. Con lo expresado anteriormente se pretende corroborar la tesis formulada en un principio: la poesía es la materia literaria más ambigua, no posee reglas ni cánones que sean imprescindibles. Por eso, este ensayo se abre con la cita de un poeta que afirmó que la poesía procede de una zona libre que nadie domina ni puede conquistar.
Aunque el que suscribe no es muy partidario de agrupar a los poetas por nacionalidades –porque la poesía nace en un territorio ignoto y universal donde banderas, fronteras e himnos patrios no tienen cabida–, esta introducción viene al caso para hablar de poesía contemporánea escrita en Costa Rica, con base en la selección publicada en el libro Sostener la palabra. Antología de poesía costarricense contemporánea (San José: Editorial Arboleda, 2ª edición, 2018), compilada por el también poeta y novelista tico Adriano Corrales Arias. Se trata de un volumen que tiene el preciado valor de abrirnos la puerta a la obra de más de medio centenar de poetas, todos ellos con poemarios personales publicados, que de otro modo no podríamos acceder dados los consabidos problemas de difusión que sufre la poesía. Un valor en alza cuando se trata de autores que publican en un círculo editorial con escasa repercusión más allá del ámbito centroamericano.

II

A pesar de su dimensión y variedad, la poesía costarricense es una de las líricas territoriales menos divulgadas en el continente americano aunque, paradójicamente, ha suscitado numerosas antologías, muchas de ellas realizadas por los propios poetas ticos, quizás en un intento de hacer bueno el refrán de que la unión hace la fuerza y así, en bloque combinado de diferentes autores, poder alcanzar la difusión y repercusión que se merecen.
Como precisa Adriano Corrales en su introducción a este libro, la poesía que se escribe desde hace años en Costa Rica —podemos retrotraernos a mediados del siglo pasado—, creada por autores que han nacido o se han afincado en ese territorio, ha tenido un desarrollo particular e interesante. Para cualquier neófito, o incluso alguien versado en poesía costarricense, es condición previa ineludible leer con detenimiento el esclarecedor texto introductorio de Adriano Corrales para ubicarse y poner en contexto lo que va a encontrar en este volumen cuajado de buenos poetas e interesantes composiciones.
Quienes conocemos, aunque sea parcialmente, la realidad poética centroamericana, y la costarricense en particular, somos conscientes de la riqueza y calidad de la poesía que se hace en esa parte del planeta. Los herederos de Darío hicieron buenas sus enseñanzas y a lo largo del sinuoso y bello territorio que une las dos partes del continente americano, ser poeta es algo casi innato, que se lleva con sano orgullo, dignidad creativa e inquietud existencial. Las raíces de la poesía en Costa Rica fueron alimentadas por autores que hicieron florecer y madurar su obra en diferentes épocas. Entre otros muchos, podemos nombrar a Lisímaco Chavarría (1878-1913), un poeta de singular lirismo modernista; Roberto Brenes (1874-1947), activo educador, poeta y ensayista; Eunice Odio (1919), poeta nacionalizada mexicana y fallecida en nuestro país en 1974, que dejó una particular poesía del éxtasis que navega entre el amor y la naturaleza, especialmente en sus obras Los elementos terrestres (1947) y Tránsito de fuego (1957): “Ven/ te probaré con alegría./ Tú soñarás conmigo esta noche/ y anudarán aromas caídos nuestras bocas./ Te poblaré de alondras y semanas/ eternamente oscuras y desnudas.” (“Posesión en el ensueño”); otro ejemplo de su calidad poética son estos versos del poema “Este es el bosque”, escrito en México en 1966: “¿A dónde vamos compañero, sin nada al sol?/ Vamos a la sagrada forma/ que no duerme jamás;/ al atareado aroma solitario, a la sangre/ que sólo sale al viento por un golpe,/ desgastando lo que toca en su tránsito.”
Otros precursores de la poesía contemporánea en Costa Rica, responsables de su importancia y trascendencia, son: Alfredo Sancho Colombari (1924-1992), poeta, novelista y dramaturgo fundador del Instituto Nacional de Artes Dramáticas de Costa Rica (inad), un autor hoy prácticamente olvidado que también vivió y falleció en México (Cantera bruta, 1965); el prolífico Alfredo Cardona Peña (1917-1995), escritor muy relacionado con México a donde llegó en 1938, docente de literatura española en la Escuela de Verano de la UNAM, e integrante de la llamada Generación Tierra Nueva –vinculada a la revista del mismo nombre, al lado de poetas como Alí Chumacero y González Durán—, que publicó la mayor parte de su obra en nuestro país (El mundo que tú eres, 1944, Los jardines amantes, 1952, Sonetos enamorados, 1958, Confín de llamas, 1969): “Es preciso no saber demasiado,/ adivinar las cosas, repartir nuestros ojos/ en millones de mundos que nos miran.”; Isaac Felipe Azofeifa (1909-1997) poeta, educador y político que entre Trunca unidad (1958) y Órbita (1996), dejó una decena de libros que transitan desde el modernismo a las vanguardias poéticas.

III

Entre los que han tenido más influencia en generaciones posteriores está Jorge Debravo (1938-1967), un poeta muy leído y estudiado (Milagro abierto, 1959; Poemas terrenales, 1964; Nosotros los hombres, 1966) que trasciende la tendencia modernista, estilo que copó el horizonte poético costarricense durante la primera mitad del pasado siglo, y abre el llamado “período de vanguardia literaria”. A Debravo le siguen otros poetas más recientes: Laureano Albán, Rodrigo Quirós, Mayra Jiménez, Julieta Dobles y Ronald Bonilla, quienes son el eslabón de la cadena que enlaza con las nuevas generaciones.
De esta variada herencia surgió una amplia nómina de autores que forman la heterogénea escala de voces de la realidad poética actual en Costa Rica. Una poesía experimental y contestataria, contracultural y apasionada, que se encuentra dispersa en un espectro editorial que abarca numerosos libros, revistas y antologías. Sobre la poesía costarricense contemporánea, el escritor Jorge Boccanera apunta en su libro Voces tatuadas. Crónica de la poesía costarricense 1970-2004, que durante ese período la poesía hecha en Costa Rica, además del lenguaje menos rígido y la búsqueda de otras posibilidades estéticas, también había cambiado “el lugar del poeta, situado ahora en el polo opuesto del intérprete del universo, más cerca del antihéroe que echa mano a lo lúdico y se torna sarcástico y coloquial en el desmenuzamiento de la zozobra cotidiana. Se escribe una poesía proclive a la mixtura de estilos y mundos culturales diferentes. Surgen nuevos caminos expresivos que fusionan lenguajes: poesía visual, juegos tipográficos, collage, técnicas de montaje, textos de historieta y letras de canciones.”
En definitiva, la experiencia de sumergirse en la lectura del volumen Sostener la palabra es un acto de lo más recomendable para cualquiera que viva y disfrute la poesía. Supone un baño revitalizante de arte poético donde, entre los más de sesenta autores seleccionados, nos encontramos con la madurez lírica de los poetas nacidos alrededor de 1950: Anabelle Aguilar Brealey, Juan Antillón, Alfonso Chase, Helio Gallardo, Mayra Jiménez, Guillermo Sáenz Patterson, Osvaldo Sauma y Joaquín Soto; la frescura de los nacidos a partir de 1960, entre otros: Melvin Aguilar, Nidia María González, Mainor González Calvo, Ana Istarú, Silvia Piranesi, Adriano de San Martín Corrales, Joaquín Soto y Carlos Villalobos; así como a los nacidos fuera de Costa Rica, residentes o naturalizados, como Carlos Calero, Helio Gallardo, David Maradiaga, Américo Ochoa y Camila Schumacher, que corroboran la tesis de que la poesía vive y crea por encima de fronteras y nacionalidades.
Por último, sólo resta precisar que Sostener la palabra es una antología que renueva la certeza, a veces olvidada, de que en todos los lugares del planeta subsiste una valiosa, y muchas veces desconocida, caterva de escritores que hallan en la poesía la forma de expresar su visión del mundo y comunicar sus experiencias. Este volumen facilita la entrada al espacio lírico de un país de interesante tradición poética, tan cercano como desconocido para los innumerables amantes de la poesía que vivimos en México.

Lugones, Donne, Stevenson,Chesterton, "El Fausto". Wells, Dante. Bioy Casares. Diarios íntimos. Borges.


Sábado, 20 de julio. Come en casa Borges.1957.
BORGES: ¿Qué te parece Lugones?». BIOY: «En
quinientos años hubiera aprendido a escribir». BORGES: «No supo nunca
escribir en un estilo tranquilo. O es literario, con ópalos y crisoberilos, o
notarial, con la enmienda pertinente,1 que comporta de suyo. Quevedo nunca
hubiera aprendido a escribir. Yo creía que era mejor que Góngora, pero
Góngora es capaz de emocionarse y de comunicar emoción».
Cita versos del poema sobre Córdoba.
Pag.313.

***
Hablamos de Mallea. BORGES: «Escribe mal, pero sin deliberación,
por azar. Escribe silencio obeso: es feo, puede uno creer que es literatura;
él no sabe por qué lo ha escrito. En Donne hay versos lindos, pero también
hay mucha fealdad. ¿Cómo hay que escribir?». BIOY: «Lisamente,
con armonía, tratando de comunicarse con el lector, no de rechazarlo».
BORGES: «Como escribe Moore. Sin embargo, mirá cómo empezó». BIOY:
«Esa manera de escribir absurda, que teníamos en nuestros comienzos,
es útil como disciplina. Nos enseña a evitar descuidos. Tal vez lo que
pueda uno lograr de vez en cuando es una alusión leve y no insistida.
Para encontrarla, aquella disciplina nos sirvió. En la Biblia hay frases así:
que comunican por alusión feliz. No puede uno escribir un libro hecho
de esas frases». BORGES: «Tal vez Stevenson puede escribir con frases complicadas,
sin que se noten complicadas. ¿Y Chesterton? Bueno, todo en
él es como un juego de marionetas». BIOY: «Uno entra en el juego y lo
acepta. Nada rompe el estilo. Bueno, tal vez esta argumentación podría
emplearse para defender a Larreta. Pero Larreta juega mal su juego, y su
juego es poco interesante». BORGES: «A los españoles les gusta un vaivén
dialéctico, esto y aquello:
Faltar pudo su patria al grande Osuna
pero no a su defensa sus hazañas.
Bueno, si les gusta es inobjetable». BIOY: «Y qué me decís del comienzo
del famoso soneto:
No me mueve, mi Dios, para quererte
el cielo que me tienes prometido,
ni me mueve el infierno tan temido
para dejar por eso de ofenderte.
¿Qué me decís del por eso?». BORGES: «¿Qué significa el por eso? ¿Temen
que el desmemoriado lector se olvide?
Pag. 315
***
Sobre el Fausto. BORGES: «Es raro que el mal no se sienta en este libro.
En Macbeth se siente. En el Fausto, no: hay dos señores que charlan. El
episodio de Margarita es bastante endeble: tango avant la lettre. Qué raro
que a nadie, ni siquiera a los alemanes, se les haya ocurrido nunca representar
el Fausto. Tal vez tenga razón Rest: no hay fantasía en la literatura
alemana».
Pag.319.

Miércoles, 24 de julio.1957.
 Come en casa Borges. Dice que una debilidad
del Paraíso perdido es que el mundo fantástico está imaginado a medias:
«Dante lo imaginó vividamente —bueno, al paraíso, no— y el lector sigue
el libro interesado, como si leyera una novela fantástica. Dante procede
como Wells; sin duda, la luna no será como la describe Wells, pero
mientras opera la suspension of disbelief uno la admite así, porque corresponde
a una invención coherente». BIOY: «Qué raro. Cuanda la gente vi¬
site la luna, el libro de Wells perderá un poco de su validez». BORGES: «En
el prólogo a la traducción de Ibarra del "Cementerio marino" yo digo
que si un día se llega a saber lo que ocurre después de la muerte, la mitad
de la literatura y de la filosofía quedarán invalidadas».
Pag.320.
Ficha técnica

Nº de páginas:
1664
Editorial:
DESTINO
Idioma:
CASTELLANO
Encuadernación:
Tapa dura
ISBN:
9788423338733
Año de edición:
2006
Plaza de edición:
BARCELONA



sábado, 8 de junio de 2019

Traducciones: Cervantes, Sir Roger Casement, Seis problemas para don Isidro Parodi.


BIOY CASARES. DIARIOS ÍNTIMOS. BORGES.

Sábado, 29 de junio. Comen en casa Borges y Peyrou.
De un tal Atkinson, profesor de literatura española de la Universidad
de Glasgow, dice Borges: «Como tiene odio por Calderón, todos los años
se ingenia de algún modo para no hablar de él. No tiene ninguna curiosidad
por la literatura argentina». BIOY: «Piensan (desde Escocia, digamos)
que la literatura española es la auténtica. No van a pasar más allá, en
el esfuerzo, y alcanzar los matices, las variantes, los sustitutos». BORGES:
«Niega la posibilidad de que algún norteamericano escriba bien, y como
prueba cita a un escritor norteamericano que ha dicho que en Inglaterra
todos escriben bien. No me parece elegante emplear así esa cita. Del traductor
norteamericano del Quijote dice que es malo, que carece de idio¬
matic English y es incapaz de reproducir la concisión de Cervantes. Yo no
creo que pueda hablarse de la concisión de Cervantes. Las frases de Cervantes
se derraman: es un señor que habla y habla, muy agradablemente».
Pag. 301. año 1957.

***
Sábado, 6 de julio. Comemos, en El Malambo, en honor a Ema Risso
Platero. Pag. 303.
Refiero a Borges que sir Roger Casement fue probablemente homosexual,
y que había escrito en un diario íntimo sus experiencias.1 BORGES
(que reprueba la homosexualidad como tema literario): «¿Anotó
esas cosas en el diario? Qué bruto». Sobre la condena de sir Roger Casement,
basada en sus costumbres, recuerda que Housman escribió un poema
en que se encarcela a un hombre por el color de su pelo.

***.
Martes, 9 de julio. Come en casa Borges. 1957.
Sobre Seis problemas para don Isidro Parodi, Borges observa: «Una cosa
le falta a ese libro para que pueda ser considerado muy bueno: le falta el
éxito. Yo no sé si sin éxito una obra puede ser muy buena». Después de
un momento de reflexión agrega: «La gente ha de sentir que ese libro
está escrito contra muchas supersticiones; ha de sentirlo como un ataque
personal».

Nº de páginas:1664
Editorial:DESTINO
Idioma:CASTELLANO
Encuadernación:Tapa dura
ISBN:9788423338733
Año de edición:2006

Plaza de edición:BARCELONA

viernes, 7 de junio de 2019

Octavio Paz, Orlando Furioso, Menéndez y Pelayo, Quevedo, Mujica Lainez, Homero, Marlowe.


Biioy Casares. .Diarios íntimos. Borges.

25 de mayo de 1957.
Comentamos títulos absurdos. Recuerdo Libertad bajo palabra de Octavio
Paz: «A continuación del título vigoroso, poemas deshilachados.
Pero no agradables, no vayas a creer: en cuanto asoma la posibilidad del
agrado, el poeta reacciona, no se deja ganar por blanduras, y nos asesta
una vigorosa, o por lo menos incomoda, fealdad. Así cree salvar su alma»
Pag 277.
Domingo, 26 de mayo.1957.
El Orlando Furioso ya está hecho en broma; empieza el libro
con un hombre que mata a cientos. Está hecho en broma, por eso no
está mal. Pag. 278.
***
Viernes, 7 de junio, 1957.
Dabove dice que habría que probar alguna vez
el éter, la morfina y la cocaína; que probablemente es inexpresable la
sensación que producen el éter y la cocaína, pero que, según su experiencia,
es una mezcla de placer sexual y de soberbia intelectual: «La
persona que ha respirado éter, de pronto mira desdeñosamente a los
que lo rodean. Está pensando: "Pobres infelices, ustedes no saben lo que
yo siento"». Afirma Dabove que la morfina no es un somnífero: «Suprime
el dolor; si el dolor ha tenido sin dormir durante muchas horas a
una persona, es natural que al desaparecer, por causa de la morfina, la
persona se duerma».
Pág. 283.


Sábado, 8 de junio 1957.
Menéndez y Pelayo tenía mal gusto. Sus antologías son
pésimas. ¿Cómo incluyó en Las cien mejores poesías líricas de la lengua castellana
"Ande yo caliente y ríase la gente" (qué vulgaridad) y "Poderoso
caballero es don Dinero"? ¿No encontró nada mejor en Góngora y en
Quevedo? Sin duda le gustaban porque tenía un lado chabacano. Lo
mejor que tiene es la prosa: es una prosa agradable. Leyó mucho, pero
sin duda leyó mucho malo.
Pag. 286.

Viernes, 14 de junio.1957.
 Borges me refiere: «Durante la comida de
ayer, continuamente Mujica Lainez venía de su asiento a nuestra parte
de la mesa. El propósito de estos viajes, que Mujica no ocultó, era tocar
la nuca de un muchacho que lo emocionaba. "Se parece a Bel¬
grano", exclamó Mujica Lainez. "¿Usted, Manucho, admira a Belgra¬
no?", preguntó Wally Zenner. "¿Cómo no voy a admirarlo —replicó el
escritor—, con esos muslos y con esas caderas?"». Borges comenta: «Va
Manucho al Museo de Luján y todas las antiguallas reviven. Manucho
no mira los cuadros fríamente: es un contemporáneo de lo que está
mirando».
P.289.
Sábado, 15 de junio. 1957.
Hablamos de la Odisea y de la Iliada. BIOY (a Borges): «A vos te gusta
mas la Odisea. Yo prefiero la Iliada. Comprendo que la Odisea es mas novelesca,
pero en la Iliada hay algo epico que no he sentido en ninguna
parte». A pesar de su vieja preferencia por la Odisea, Borges trata de
darme la razon: dice que Reyes tambien prefiere la Iliada; que segun
Butler la Odisea es la mujer de la Iliada;2 que a pesar de la intervencion
de los dioses, uno siente que los guerreros son valientes (a diferencia de
lo que ocurre con los guerreros celtas, en cuyo valor no se cree). BORGES:
«Lo que ocurre a cada uno es muy importante». BIOY: «Son pocos. No estan
perdidos en la multitud. El destino de los individuos pesa en las batallas:
lo contrario del admirable Verdun de Jules Romains. Realmente los
hombres son heroes». BORGES: «Homero es muy minucioso sobre lo que
les pasa; las heridas se detallan: mano la negra sangre. (Pausa) Que extrana
es la literatura. Porque el encabezamiento de la Odisea esta en la traduccion
de Lawrence3 en lineas de todo el ancho de la pagina, la impresion
es de que uno lee otro libro. Esta bien, de parte de Lawrence, el haberse dado cuenta».
***
Miercoles, 26 de junio. 1957.
BORGES: «... ¿Sabés quién, he descubierto, era pederasta? Marlowe. En Hero and Leander, cuando describe a la heroína, es moderado, pero al describir  al héroe pierde la cabeza». BIOY: «Pues yo también hice un descubrimiento:
que la novela es un género para maricones. Cuando uno se
pone a describir minuciosamente al héroe se siente maricón». BORGES:
«Marlowe sería un pederasta por exceso, como parece que habrán sido
muchos en tiempos de Shakespeare. El destino del pederasta activo es
convertirse en pederasta pasivo... Bueno, todo ennoblecido por el sentimiento,
como tantas cosas: mirá que llenarse de comida es algo triste,
el hombre como recipiente, como un barrilito... y sin embargo, ahí te-
| nés los banquetes, los ágapes, presentados como victorias del hombre
| sobre sus flaqueza
P.298.
***

Ficha técnica
Nº de páginas:1664
Editorial:DESTINO
Idioma:CASTELLANO
Encuadernación:Tapa dura
ISBN:9788423338733
Año de edición:2006

Plaza de edición:BARCELONA

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