viernes, 13 de enero de 2012

DANIEL SADA


Alistan homenaje a Daniel Sada en Bellas Artes

El fallecido autor fue reconocido con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2011
MÉXICO | Jueves 12 de enero de 2012Notimex | El Universal12:07
Comenta la Nota



Por ser uno de los exponentes más sólidos de las letras mexicanas de finales de siglo XX y principios del XXI, el fallecido escritor mexicano Daniel Sada será homenajeado el próximo domingo en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.
Personalidades de la literatura como Christopher Domínguez, Iván Trejo, Yuri Herrera, Federico Campbell y Jaime Mesa llevarán a cabo una mesa redonda en la que hablarán sobre la obra de Sada. Además, se presentará una lectura a cargo de Marcela Sánchez Mota.
La carrera de Daniel Sada, quien falleció el 18 de noviembre de 2011, a los 58 años de edad, se distinguió por la constante búsqueda de una renovación estilística, situándose como uno de los más respetados autores de su momento.
Caso ilustrativo es el del chileno Roberto Bolaño, quien sin espacio para la duda declaraba su admiración por la escritura de Sada, a la cual consideraba como la más "'arriesgada de su generación".
La trayectoria literaria de Sada fue reconocida por los más importantes galardones literarios, siendo el más reciente el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2011, que obtuvo en el campo de Linguística y Literatura.
También fue merecedor de los premios Xavier Villaurrutia 1992 por Registro de causantes; el Bellas Artes de Narrativa Colima para Obra Publicada 2006, porRitmo Delta, y el Nacional de Literatura José Fuentes Mares 1999, por Porque parece mentira la verdad nunca se sabe. A nivel internacional obtuvo el Herralde de Novela 2008 por Casi nunca.
El carácter poco convencional de la escritura de Daniel Sada le valió en muchas ocasiones ser considerado como un autor barroco y colocado a la altura de figuras universales como el cubano José Lezama Lima.
Al respecto, el escritor Federico Campbell señala que la obra de Sada es tan importante en la historia de la literatura mexicana como la del mismo Juan Rulfo, tanto por sus aportaciones al lenguaje como por su capacidad para develar un México que no estaba registrado literariamente.
En ese contexto, el escritor y periodista descarta las apreciaciones que consideran a Daniel Sada como un autor cuya obra se basa exclusivamente en su forma verbal, pues por el contrario, apunta, su creación tiene sus raíces en la cruda realidad que cotidianamente enfrentan los mexicanos.
Como se puede ver en Porque parece mentira la verdad nunca se sabe, Campbell afirma que es evidente que en la obra de Sada se manifiesta un México real, desgarrado, hundido en la miseria, que le duele y el cual incorpora a su obra novelística.
Así, continuó, su prosa muestra que no se trata de un autor que sólo hace juegos verbales, sino que cada una de sus páginas está preñada de vida y realidad, que tiene como trasfondo esa miseria de la que no puede salir gran parte del pueblo mexicano.
Para acercarse a esta obra fascinante y compleja, se sugiere comenzar por los cuentos, especialmente los contenidos en Registro de causantes, en algunos de los cuales el autor despliega un gran sentido del humor.
Daniel Sada nació en Mexicali, Baja California, el 25 de febrero de 1953. Estudió periodismo y Letras Hispánicas, fue catedrático en la Universidad Autónoma de Zacatecas y profesor en diversos centros educativos y colaborador de revistas y periódicos de circulación nacional.
Otras novelas que publicó son: Lampa vida (1980), Albedrío (1989), Una de dos' (1994), Luces artificiales (2002),Ritmo Delta (2005), La duración de los empeños simples (2006) y A la vista (2011). También incursionó en poesía, con los títulos Los lugares (1978), El amor es cobrizo (2005) y Aquí (2008).
sc 

jueves, 12 de enero de 2012

JORGE VOLPI

http://www.informador.com.mx/cultura/2012/350329/6/comparte-jorge-volpi-su-pasion-por-la-ciencia-y-la-literatura.htm


Comparte Jorge Volpi su pasión por la ciencia y la literatura

     
Sostiene que las novelas y los cuentos han sido esenciales para la evolución de la especie humana.
  • Presenta su más reciente ensayo editado en 2011
  • Reúne sus dos pasiones en el libro ''Leer la mente. El cerebro y el arte de la ficción''
CIUDAD DE MÉXICO (11/ENE/2012).- Desde que era niño, Jorge Volpi estuvo fascinado con el mundo de la ciencia, que lo convirtió en asiduo lector y despertó su gusto por la literatura, ahora reúne sus dos pasiones en el libro 'Leer la mente. El cerebro y el arte de la ficción".

Al ofrecer hoy una charla en una escuela de educación privada, ubicada en el sur de la ciudad, el escritor y ensayista mexicano presentó su más reciente ensayo editado en 2011, el cual desentraña la vieja idea la ficción como entretenimiento, y sostiene que las novelas y los cuentos han sido esenciales para la evolución de la especie humana.

El también autor de "La paz de los sepulcros" y "El temperamento melancólico" detalló que si bien de pequeño decía que estudiaría ciencias físicas mucho más que biológicas o químicas; no obstante, tras enfrentarse a pésimos maestros en el área de ciencias se enfrentó al descubrimiento de la literatura, de este modo, abandonó la ciencia para enfocarse al área humanística.

Tras perder contacto directo con las ciencias, "quise recuperarlas a través de la literatura, y así que la literatura fuera el medio de vivir otras vidas, que es una de las razones por las que existe. Yo quería vivir historias de científicos, así fue como nacieron algunas de mis obras, como `Klingsor´", apuntó el escritor.

En este sentido, Volpi explicó que 'Leer la Mente. El Cerebro y el arte de la ficción", es un ensayo de divulgación científica que trata de vincular ciencia y literatura.

Igualmente señaló que "la ficción nos enseña a ser humanos", porque la ficción resulta ser la capital para nuestra especie; "la literatura no sirve para entretenernos ni para embelesarnos; nos hace humanos".

El Premio Iberoamericano "José Donoso" 2009 sostuvo que el cerebro "codifica, procesa y, a la postre, reinventa el mundo tal como un escritor concibe una novela o un lector la descifra"; hipótesis que sustentan autores como Gustave Flaubert, Brian Boyd, Douglas Hofstadter y James Joyce.

Finalmente Volpi aseguró que "todos somos ficciones y que la literatura es una de las claves de nuestra identidad individual y nuestras pasiones compartidas". 

miércoles, 11 de enero de 2012

"LOS PREMIOS LITERARIOS: LOS JURADOS, LOS CANDIDATOS... UN ASUNTO DEL NUNCA ACABAR... PORQUE SIEMPRE EXISTIRÁN INCONFORMES CON LOS FALLOS"

Diez disparates del Nobel de Literatura

11 enero 2012
Lawrence Durrell: "monomaníaca preocupación erótica"
Lawrence Durrell: "monomaníaca preocupación erótica"
Un reportero sueco difundió hace unos días los argumentos que tiene en cuenta el comité que decide elNobel de Literatura para conceder o denegar el magno y siempre polémico premio.
¿Análisis semióticos? ¿Comparación de textos? ¿Interpretaciones críticas? ¿Sesudos razonamientos y premisas seguidos de conclusiones deductivas? No va por ahí la cosa: se trata de algo que procede de la praxis de andar por casa del batín guateado y el coñac.
Ahora sabemos que para el jurado designado por laAcademia Sueca en 1961 J.R.R. Tolkien era un escritor con una prosa “de segunda categoría”, Lawrence Durrellsufría una “monomaníaca preocupación por las complicaciones eróticas”, Alberto Moravia adolecía de una “monotonía general”, Robert Frost era por entonces “demasiado viejo” (86) y E.M. Forster se había convertido en “una sombra de lo que fue”.
Graham Greene
Graham Greene, nunca
¿Quién ganó a Tolkien, Durrell, Moravia, Frost, Forster y los otros dos finalistas de 1961, nada menos que Graham Greene y Karen Blixen? El jurado decidió otorgar el galardón, “por la fuerza épica con la que ha reflejado temas y descrito destinos humanos de la historia de su país”, al poeta yugoslavo Ivo Andrić. Quizá a ustedes no les suene.No se inquieten: somos millones.
Hoy dedicamos nuestra sección de los miércoles,Cotilleando a…, a unas cuantas sombras, polémicas, injusticias, desafueros, iniquidades y disparates del Nobel de Literatura (1,4 millones de dólares en metálico, diploma, medalla de oro y un televisadísimo y muy ventajoso en términos de royalties ‘choca esos cinco’ con el Rey de Suecia).
1. Para empezar, una nómima de apestados:  Marcel ProustEzra PoundJames JoyceVladimir Nabokov,Virginia WoolfJorge Luis BorgesJohn Updike… Con sus obras se podría subsistir durante varias vidas, pero ninguno ganó el Nobel, casi siempre por motivos extraliterarios o políticos.
Borges y la "tradición escandinava"
Borges y la "tradición escandinava"
2. La Academia Sueca nunca quedó mejor retratada en su medianía como hurtando el premio a Borges, nominado casi todos los años desde la década de los sesenta.  Se especula que en 1977 habían decidido dárselo (a medias con el español Vicente Aleixandre), pero reconsideraron la propuesta porque Borges fue a Chile a recibir una medalla que entregaba el dictador Augusto Pinochet (sin justificar al escritor, conviene recordar que los premiadosJean-Paul Sarte (1964) y Pablo Neruda (1971) apoyaron de palabra, obra y actos al mayor asesino de masas de la historia, José Stalin). Cuando le preguntaron si sabía que ponía en peligro el Nobel, Borges dijo: “Pero fíjese que yo sabía que me jugaba el Premio Nobel cuando fui a Chile y el presidente ¿cómo se llama?… Sí, Pinochet, me entregó la condecoración. Yo quiero mucho a Chile y entendí que me condecoraba la nación chilena, mis lectores chilenos”. En 1981 un periodista preguntó a Borges: “¿A qué atribuye que no le hayan dado el Nobel de Literatura?”. El escritor respondió: “A la sabiduría sueca”. En otra ocasión dijo: “Yo siempre seré el futuro Nobel. Debe ser una tradición escandinava”. Según una de sus biografías, a Borges le afectaba el ninguneo más de lo que simulaba. Cada octubre recibía la noticia de que no había obtenido el Nobel “con humor agridulce y el corazón apretado” y “adoptó aires de perdedor experto”.
Sartre y De Beauvoir
Sartre y De Beauvoir
3. Jean-Paul Sartre rechazó el premio en 1964 porque no deseaba ser “institucionalizado por el Oeste o por el Este” (“no es lo mismo si firmo Jean-Paul Sartre que si firmo Jean-Paul Sartre, Premio Nobel”, dijo). El escándalo fue mayúsculo. Al autor de La náusea le llovieron los insultos. Le llamaron “hiena dactilográfica” y “delincuente del espíritu”, le describieron como un “pequeño hombrecillo de los ojos desviados, aquel que parece saberlo todo” y le acusaron de ejercer el “excrementalismo sartreano”. Recibió centenares de cartas de personas humildes que lo impulsaban a aceptar el premio y donar el dinero. La prensa rosa terció en el asunto: adujo que Sartre había rechazado el Nobel para evitar los celos deSimone de Beauvoir, su compañera sentimental. Sartre escribió: “Rechazo 26 millones [de francos de entonces] y me lo reprochan, pero al mismo tiempo me explican que mis libros se venderán más porque la gente va a decirse: ‘¿Quién es este atropellado que escupe sobre semejante suma?’. Mi gesto va pues a reportarme dinero. Es absurdo pero no puedo hacer nada. La paradoja es que rechazando el premio no he hecho nada. Aceptándolo hubiera hecho algo, que me habría dejado recuperar por el sistema”. La Academia sueca se hizo la sueca: “El laureado nos informa que él no desea recibir este premio, pero el hecho de que él lo haya rechazado no altera en nada la validez de la concesión”. En suma: muy a su pesar, Sartre sigue figurando entre los laureados.
Philip Roth, "aislado, insular"
Philip Roth, "aislado, insular"
4. La última polémica dura se desató en 2008, cuando el entonces secretario de la Academia Sueca, Horace Engdahldeclara sin sonrojo a una agencia de prensa que“Europa todavía es el centro literario del mundo”, acusa a los EE UU de ser una nación “demasiado aislada, demasiado insular” [Suecia tiene 9,4 millones de habitantes, menos que la ciudad de Nueva York] y a sus literatos de ser “sensibles a las tendencias de su propia cultura de masas”. La crítica literaria estadounidense aprovecha la concesión del premio de 2009 a la rumano-alemana Herta Müller para tildar a los académicos de “eurocéntricos” y, con bastante razón, menciona, entre otros, a Philip Roth, autor de refinado y astuto cosmopolitismo que introdujo en los EE UU a notables escritores europeos como Danilo KišWitold GombrowiczMilan Kundera y Primo Levi, que tampoco ganaron el Nobel. La última escritora de los EE UU en obtener el premio fue Toni Morrison en 1993 (en total, una decena de estadounidenses lo han ganado). Europa ha dominado con carácter casi autárquico el galardón en las últimas décadas. Hay escasas excepciones: Mario Vargas Llosa [que tiene nacionalidad española] (2010), el turco Orhan Pamuk (2006), el sudafricano J.M. Coetzee(2003), el chino Gao Xingjian (2000), el japonés Kenzaburo Oe (1994)…
5. Desde la primera edición del Nobel (1901), los escritores suecos han recibido más premios que los de toda Asia.
Elfriede Jelinek, "masa de texto"
Elfriede Jelinek, "masa de texto"
6. El premio a la austriaca Elfriede Jelinek (2004), una especie de Lucía Etxebarría centroeuropea y sin tufo a paella, derivó en la renuncia del académico Knut Ahnlund, que habló de la concesión como “un daño irreparable” al prestigio del Nobel y a las “fuerzas progresistas” y calificó la obra de la escritora como “una masa de texto sin el menor rastro de estructura artística”. Unos años antes, en 1989, otro par de académicos, Kerstin Ekman y Lars Gyllensten, dimitieron en protesta por el silencio de la institución sobre la condena a muerte dictada por el Ayatolá Jomeini contra el escritor Salman Rushdie (propuesto como candidato pero rechazado por ser “demasiado popular”, según declaró un miembro del jurado). Ese año se llevó el premio el escritor español Camilo José Cela.
7. El año de la gran vergüenza para los académicos fue 1974, cuando el Nobel se lo llevaron los escritores suecosEyvind Johnson y Harry Martinson, desconocidos fuera de su país y asiduos miembros de los jurados que adjudican el premio. Eran candidatos dos de los grandísimos ausentes en el listado, Graham Greene y Vladimir Nabokov, y Saul Bellow, que lo ganó dos años más tarde.
W.H. Auden, bocazas
W.H. Auden, bocazas
8. El poeta W.H. Auden tenía el Nobel en el bolsillo, pero cometió la imprudencia de comentar en conferencias públicas en Suecia que el premio Nobel de la Paz de 1961, el sueco Dag Hammarskjöld, secretario general de la ONU entre 1953 y 1961, era homosexual (como Auden).
9. También estuvo a punto de obtenerlo André Malraux, pero a los académicos les parecía “demasiado rojo”.
10. La regla no escrita pero tácita durante las primeras décadas de los premios era lo que se llamaba dirección ideal. La Academia tenía claro cuál era literariamente hablando: el conservadurismo. Así se explica el premio aRudyard Kipling (1907) y los rechazos a sus contemporáneos León Tolstói y Émile Zola. Con el tiempo la dirección ideal fue sustituida por el interés general, lo que dió lugar a premios baratos como los de Sinclair Lewis(1930) y Pearl Buck (1938). Ahora no hay dirección alguna y parece, como en el libre mercado y los consejos de ministros de Rajoy, que todo vale.
Ánxel Grove

domingo, 8 de enero de 2012

JORGE LUIS BORGES: PREMIO CERVANTES 1979.





Premio Cervantes 1979
JORGE LUIS BORGES
Escritor argentino
(Buenos Aires, 1899–Ginebra, 1986)
Junto con su hermana Norah, nacida en
1901 y con quien le uniría siempre una gran amistad, crece en un ambiente familiar
bilingüe español e inglés. Su padre fomenta su temprana vocación de escritor.
En 1914, debido a una ceguera casi total, el padre se jubila y decide pasar una larga
temporada en Europa con su familia. Se instalan en Ginebra donde Borges cursa el
bachillerato. Aprende francés y latín; descubre a los clásicos franceses, también a
Carlyle y Chesterton; aprende alemán por su cuenta, lee a Heine, a Walt Whitman, a
Schopenhauer y a Nietzche.
En 1918 la familia viaja a España y se instalan, primero, en Barcelona y, después, en
Mallorca. En Sevilla, Borges inicia su vida literaria; se une a los poetas ultraístas;
colabora con las revistas Grecia, Hélices, Cervantes, Cosmópolis y Ultra. Viaja a Madrid
e intima con Guillermo de Torre, con quien firma un manifiesto ultraísta. Allí conoce
también a Cansinos Assens, a Ramón Gómez de la Serna, Valle Inclán, Ortega y Gasset
y Gerardo Diego.
En 1921 regresa a Argentina; funda las revistas Proa y Prisma y colabora activamente
en Martín Fierro, revista de los jóvenes vanguardistas. En 1930 conoce a Bioy Casares,
su mejor discípulo, colaborador e íntimo amigo. En 1931 colabora, desde sus inicios,
con la revista Sur fundada por Victoria Ocampo, revista que se convertirá en la más
influyente de América Latina. En esos años publica tres libros de poesía escritos de
versículos de aire whitmaniano: Fervor de Buenos Aires (1923), Luna de enfrente (1926)
y Cuaderno de San Martín (1929).
En 1935, publica Historia Universal de la infamia y, en 1936, su libro de ensayos Historia
de la eternidad. En 1938, muere su padre y él tiene un grave accidente que le
produce una progresiva ceguera que lo hace dependiente de su madre y amigos
para el desarrollo de su labor literaria.
Borges cultivó el cuento, la poesía, el ensayo, la crítica literaria y la novela. La
publicación en 1942 de El jardín de senderos que se bifurcan (luego incorporado a
Ficciones, 1944) marca un hito en el proceso que conducía a la nueva novela.
Admirador de Lugones, Chesterton, Marcel Schwob, Joseph Conrad y Schopenhauer,
entre otros, Borges emerge como el autor más representativo de la literatura
fantástica: Historia universal de la infamia (1935), Ficciones (1944) o El aleph (1949).
En sus cuentos más originales, Borges explora conceptos como lo conjetural o lo
simbólico. Estos cuentos son, de alguna manera, parábolas o apólogos que ilustran la
posibilidad de que todo sea un conjunto de símbolos o hechos repetidos en el decurso
de los tiempos para concluir en otro hecho, tan fortuito o paradójico como el que lo
originó. Borges se nos presenta contemplando la realidad como si fuera un extraño y, a
veces, aterrador rompecabezas que, sin embargo, podría quizás contener indicios de
posibles explicaciones, aunque fuesen de un tipo que nuestra mente está
condicionada a resistir. Lo que mantiene el equilibrio de muchos de sus cuentos es el
humorismo. Pero no es el humorismo nacido del sufrimiento espiritual, sino la expresión
de la conciencia serena y casi juguetona que tiene Borges del absurdo como parte
integral de la condición humana.
Borges se opuso siempre al peronismo en su país y adoptó una actitud conservadora
que le llevó incluso a apoyar a veces las peores dictaduras militares, aunque al final de
su vida apoyó tardíamente los juicios contra sus crímenes. Estuvo casado durante un
breve periodo a una edad avanzada y, poco antes de su muerte, se casó por poderes
con su discípula y acompañante María Kodama.
A partir de los años cincuenta, Borges ha sido traducido a infinidad de lenguas
extranjeras y ha recibido, además del Cervantes, innumerables premios, distinciones y
doctorados honoris causa.

SEGUNDA NOTA BIOGRÁFICO-LITERARIA.

Jorge Luis Borges
(Argentina, 1899-1986) 
 Escritor argentino cuyos desafiantes poemas y cuentos vanguardistas le consagraron como una de las figuras prominentes de las literaturas latinoamericana y universal. Nacido el 24 de agosto de 1899 en Buenos Aires, e hijo de un profesor, estudió en Ginebra y vivió durante una breve temporada en España relacionándose con los escritores ultraístas. En 1921 regresó a Argentina, donde participó en la fundación de varias publicaciones literarias y filosóficas como Prisma (1921-1922), Proa (1922-1926) y Martín Fierro en la que publica esporádicamente, escribió poesía lírica centrada en temas históricos de su país, que quedó recopilada en volúmenes como Fervor de Buenos Aires (1923), Luna de enfrente (1925) y Cuaderno San Martín (1929). De esta época datan sus relaciones con Ricardo Güiraldes, Macedonio Fernández, Alfonso Reyes y Oliveiro Girondo. En la década de 1930, debido a una enfermedad hereditaria, comenzó a perder la visión hasta quedar completamente ciego. A pesar de ello, trabajó en la Biblioteca Nacional (1938-1947) y, más tarde, llegó a convertirse en su director (1955-1973). Conoce a Adolfo Bioy Casares y publica con él Antología de la literatura fantástica (1940). A partir de 1955 fue profesor de literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires. Durante esos años, fue abandonando la poesía en favor de los relatos breves por los que ha pasado a la historia. Aunque es más conocido por sus cuentos, se inició en la escritura con ensayos filosóficos y literarios, algunos de los cuales se encuentran reunidos en Inquisiciones. La historia universal de la infamia (1935) es una colección de cuentos basados en criminales reales. En 1955 fue nombrado académico de su país y en 1960 su obra era valorada universalmente como una de las más originales de América Latina. A partir de entonces se suceden los premios y las consideraciones. En 1961 comparte el Premio Fomentor con Samuel Beckett, y en 1980 el Cervantes con Gerardo Diego. Murió en Ginebra, el 14 de junio de 1986. 
Las posturas políticas evolucionaron desde el izquierdismo juvenil al nacionalismo y después a un liberalismo escéptico desde el que se opuso al fascismo y al peronismo. Fue censurado por permanecer en Argentina durante las dictaduras militares de la década de 1970, aunque jamás apoyó a la Junta militar. Con la restauración democrática en 1983 se volvió más escéptico. A lo largo de toda su producción, Borges creó un mundo fantástico, metafísico y totalmente subjetivo. Su obra, exigente con el lector y de no fácil comprensión, debido a la simbología personal del autor, ha despertado la admiración de numerosos escritores y críticos literarios de todo el mundo. Describiendo su producción literaria, el propio autor escribió: -No soy ni un pensador ni un moralista, sino sencillamente un hombre de letras que refleja en sus escritos su propia confusión y el respetado sistema de confusiones que llamamos filosofía, en forma de literatura-. 
Ficciones (1944) está considerado como un hito en el relato corto y un ejemplo perfecto de la obra borgiana. Los cuentos son en realidad una suerte de ensayo literario con un solo tema en el que el autor fantasea desde la subjetividad sobre temas, autores u obras, se trata pues de una ficción presentada con la forma del cuento en el que las palabras son importantísimas por la falsificación (ficción) con que Borges trata los hechos reales. Cada uno de los cuentos de Ficciones está considerado por la crítica como una joya, una diminuta obra maestra. Además, sucede que el libro presenta una estructura lineal que hace pensar al lector que el conjunto de los cuentos conducirán a un final con sentido, cuando en realidad llevan a la nada absoluta. Otros libros importantes del mismo género son El Aleph (1949) y El hacedor (1960). 


DISCURSO: PREMIO CERVANTES.
- 1 -
Majestades, señoras y señores: El destino del escritor es extraño, salvo que todos los
destinos lo son; el destino del escritor es cursar el común de las virtudes humanas, las
agonías, las luces; sentir intensamente cada instante de su vida y, como quería Wolser,
ser no sólo actor, sino espectador de su vida, también tiene que recordar el pasado, tiene
que leer a los clásicos, ya que lo que un hombre puede hacer no es nada, podemos
simplemente modificar muy levemente la tradición; el lenguaje es nuestra tradición. El
escritor tiene una desventaja: el hecho de tener que operar con palabras, y las palabras,
según se sabe, son una materia deleznable. Las palabras, como Horacio no ignoraba,
cambian de connotación emocional, de sentido; pero el escritor tiene que resignarse a
este manejo, el escritor tiene que sentir, luego soñar, luego dejar que le lleguen las
fábulas; conviene que el escritor no intervenga demasiado en su obra, debe ser pasivo,
debe ser hospitalario con lo que le llega y debe trabajar esa materia de los sueños, debe
escribir y publicar, como decía Alfonso Reyes, para no pasarse la vida corrigiendo los
borradores, y así trabaja durante años y se siente solo, vivo en una suerte de
sueñosismo; pero si los astros son favorables, uso deliberadamente las metáforas
astrológicas, aunque detesto la astrología, llega un momento en el cual descubre que no
está solo. En ese momento que le ha llegado, que le llega ahora, descubre que está en el
centro de un vasto círculo de amigos, conocidos y desconocidos, de gente que ha leído
su obra y que la ha enriquecido, y en ese momento él siente que su vida ha sido
justificada. Yo ahora me siento más que justificado, me llega este premio, que lleva el
nombre, el máximo nombre de Miguel de Cervantes, y recuerdo la primera vez que leí
el Quijote, allá por los años 1908 ó 1907, y creo que sentí, aún entonces, el hecho de
que, a pesar del titulo engañoso, el héroe no es don Quijote, el héroe es aquel hidalgo
manchego, o señor provinciano que diríamos ahora, que a fuerza de leer la materia de
Bretaña, la materia de Francia, la materia de Roma la Grande, quiere ser un paladín,
quiere ser un Amadís de Gaula, por ejemplo, o Palmerín o quien fuera, ese hidalgo que
se impone esa tarea que algunas veces consigue: ser don Quijote, y que al final
comprueba que no lo es; al final vuelve a ser Alonso Quijano, es decir, que hay
realmente ese protagonista que suele olvidarse, este Alonso Quijano. Quiero decir
también que me siento muy conmovido, tenía preparadas muchas frases que no puedo
recordar ahora, pero hay algo que no quiero olvidar, y es esto: me conmueve mucho el
hecho de recibir este honor en manos de un Rey, ya que un Rey, como un Poeta, recibe
un destino, acepta un destino y cumple un destino y no lo busca, es decir, se trata de
algo fatal, hermosamente fatal, no sé cómo decir mi gratitud, solamente puedo decir mi
innumerable agradecimiento a todos ustedes ...
Muchas gracias.

Archivo del blog

SILVINA OCAMPO CUENTO LA LIEBRE DORADA

 La liebre dorada En el seno de la tarde, el sol la iluminaba como un holocausto en las láminas de la historia sagrada. Todas las liebres no...

Páginas